Volar sin miedo con hipnosis

Volar sin miedo con hipnosis

2016-05-12

Volar sin miedo con hipnosis


La aerofobia es el miedo o fobia a volar en aviones. Afecta a un 25% de las personas y uno de cada tres pasajeros tiene miedo al volar. Después de un accidente aéreo el número de personas que padecen aerofobia aumenta y empeora el estado de los que ya la padecían. De hecho es una de las fobias más comunes.
 

A pesar de ser un medio de transporte cada vez más utilizado una parte importante del público e incluso algunos miembros  de la tripulación sienten ansiedad al volar. Cuando esta ansiedad alcanza un nivel que afecta la capacidad de una persona para viajar en avión, se convierte en aerofobia.
 
Puede ser una fobia en si misma o una manifestación de otras fobias como la claustrofobia (miedo a los espacios cerrados) o acrofobia (miedo a las alturas). Además existen diversas fobias a volar: los que creen que el avión se va a estrellar, los que temen que van a sufrir un ataque de pánico (miedo al miedo), los que tienen miedo a no poder escapar, a la sensación de no tener el control, los que se asustan de los ruidos del avión, las turbulencias, el cada vez más frecuente miedo al terrorismo. . .
 
El miedo a volar puede oscilar desde una ligera ansiedad previa al vuelo a un estado de terror capaz de impedir que una persona suba al avión. La aerofobia recibe especial atención porque además de estar muy extendida los viajes en avión son difíciles de evitar. Puede acabar con una carrera profesional o hacer que una persona limite su capacidad de ir de vacaciones o visitar a la familia y amigos.
 
Cualquier fobia específica es una respuesta intensa de ansiedad a un objeto, situación o incluso pensamiento. El desencadenante de este miedo intenso (o ataque de pánico) puede ser cualquier cosa: una araña, el pescado o los botones. Estar asustado de cosas que no son peligrosas hace que parezca algo totalmente irracional. Y lo es realmente.
 
Una fobia no tiene nada que ver con nuestra parte racional. Por esto es inútil hablar a una persona que padece Aerofobia de estadísticas y asegurarle que en realidad la aviación es el medio de transporte más seguro. Las posibilidades de morir por un accidente aéreo son de una entre un millón. Las personas que experimentan esta fobia lo saben y pueden percibirla como una debilidad al experimentar esta contradicción entre lo que saben con su mente racional y lo que sienten con su mente emocional (subconsciente).
 
Las personas que sufren una fobia son perfectamente normales y son capaces de ver lo irracional de su comportamiento pero no pueden evitarlo. Una fobia es sencillamente un mecanismo de supervivencia que no funciona correctamente. La reacción es desmesurada, no se corresponde al objeto o situación que lo desencadena.
 
Para curar una fobia (algo sorprendentemente fácil e indoloro) necesitamos cambiar esta asociación a nivel subconsciente. La hipnosis es el mejor medio de acceder al subconsciente por esta razón resulta especialmente eficaz para las fobias. Utilizando la hipnosis nos dirigimos exactamente al lugar donde se encuentra el problema.
 
La persona necesita experimentar la situación que le produce la fobia, en este caso viajar en avión, con normalidad. De la misma manera que experimentaría viajar en otro medio de transporte, en coche por ejemplo. Algo estadísticamente muchísimo más mortal por cierto.
 
La mejor manera de hacerlo es conseguir que la persona esté relajada mientras imagina que está en la en la situación que le provoca su fobia. La hipnosis es extremadamente útil para conseguir este objetivo. En primer lugar porque mantiene a la persona en un estado de gran relajación mientras “siente” que está volando. Además permite generar “realidades hipnóticas” es decir hace que la persona experimente utilizando su imaginación la situación de estar volando muy intensa y vívidamente.
 
Este proceso recibe el nombre de descondicionamiento y sencillamente cambia la asociación negativa que tiene la persona con el estímulo que le produce la fobia.
 
Aunque esta ansiedad pueda parecernos irracional, no deja de tener su lógica. Protegernos es la función primordial del subconsciente y puede crear una gran ansiedad como una forma de evitar situaciones supuestamente peligrosas. Evidentemente volar es algo básicamente antinatural para los humanos, la reacción del subconsciente de determinadas personas ante este hecho no debería por tanto sorprendernos.
 
La reacción del cuerpo y la mente ante la fuerte ansiedad producida por la aerofobia puede provocar síntomas como:

Ataques de pánico

Latidos fuertes y acelerados

Sudoración

Sequedad en la boca

Presión sanguínea elevada

Hiperventilación

Claustrofobia

Sentimientos de pérdida de control

Elevada sensación de incomodidad

Vómitos

Sequedad en la boca

Trastornos intestinales

Discurso acelerado o incapacidad de hablar

Tensión muscular

Visión borrosa

Preocupación días, semanas o incluso meses antes de los días del vuelo
 

El miedo a volar es algo aprendido. Puede venir de nuestra infancia (quizás si los padres de quien lo padece tenían ese miedo, se lo mostraron y así transmitieron). Puede desarrollarse a partir de una experiencia particularmente terrorífica (fuertes turbulencias o un aterrizaje de emergencia). También la influencia de los medios de comunicación intensifica el miedo a volar al tratar de manera muy sensacionalista los accidentes aéreos. Finalmente el uso y abuso dramático y muy frecuente en el cine o el desconocimiento de los principios de la aviación, entre otras razones, pueden provocar o exacerbar la aerofobia.
 

Algunas sugerencias para superar este problema:

Para evitar la aerofobia es importante reorientar nuestros pensamientos de manera que sean positivos y realistas evitando el catastrofismo.

Es preferible ocupar asientos alejados de las ventanillas porque pueden aumentar nuestra ansiedad y los esfuerzos de controlar una situación que es incontrolable.

Hacer respiraciones lentas y profundas procurando aislarse utilizando música relajante especialmente al despegar o aterrizar.

Evitar ver imágenes de accidentes aéreos tanto en las noticias como en el cine para no asociar el avión con situaciones de peligro.

Viajar acompañado si es posible o procurar hablar relajadamente con los pasajeros de al lado.

La hipnosis puede ayudar fácil y rápidamente a las personas que padecen miedo a volar de diferentes maneras.
 

El estado hipnótico permite establecer en la mente poderosas sugestiones para relajarse y superar la ansiedad. (Escuchar repetidamente nuestra grabación Tu refugio interior te permitirá generar un poderoso escudo contra la ansiedad y al mismo tiempo relajarte)  Utilizando el hipnoanálisis es posible descubrir el origen del miedo siendo así capaces de tratar el problema en su raíz.
 
La hipnosis permite la comunicación con la mente subconsciente y de esta manera reestructurar patrones de pensamiento y comportamiento.  Las personas aprenden a relajarse y acceder a un estado de calma y focalización mental que les permite controlar y superar sus miedos.
 
Dos procedimientos utilizados por la hipnosis son de una gran eficacia para vencer la mayoría de las fobias incluido el miedo a volar: la desensibilización y la técnica del rebobinado.
 

La desensibilización consiste en fragmentar el miedo en diferentes grados de intensidad para superarlos progresivamente. La persona establece una jerarquía de sus miedos a volar de menor a mayor, normalmente de 10 a 12 (por ejemplo: pensar en la idea de volar, preparar el equipaje, desplazarse hasta el aeropuerto, observar las expresiones de las personas que van a volar, realizar el check in, pasar los controles de seguridad, acceder al avión, despegar, sonidos y sensaciones experimentadas, turbulencias. . .)
 
En estado hipnótico y utilizando técnicas de relajación la persona va ascendiendo sintiéndose tranquilo y seguro en esta escala de miedos utilizando esa capacidad de generar “realidades hipnóticas”. Todo el tiempo se mantiene la comunicación con el terapeuta utilizando señales convenidas (movimientos de los dedos o cabeza).
 
Cuando la persona llega a un nivel en el que experimenta la más ligera sensación de malestar lo indica y entonces el hipnotista se detiene en ese nivel proporcionando sugestiones de seguridad, confianza y confort. Habitualmente se superan 3 o 4. En las sesiones siguientes se sigue avanzando hasta que la persona se siente tranquila y segura en el último de los niveles. Se suelen proporcionar grabaciones para consolidar los avances entre las sesiones.
 
La desensibilización sistemática funciona porque el subconsciente, donde reside el problema, no es capaz de distinguir entre la realidad y algo vívidamente imaginado. La parte de la mente que genera la ansiedad se acostumbra a vivir estas situaciones con normalidad. Cuando la persona tiene que experimentarlas en la vida real ya ha realizado una especie de entrenamiento subconsciente que le permite afrontarlas con normalidad. La desensibilización es un método muy utilizado, seguro y eficaz.
 

La técnica del rebobinado, también llamada disociación visual-cinestésica puede funcionar incluso más deprisa. Una vez la persona que padece la fobia está en estado hipnótico imagina en una pantalla que está mirando una película de si mismo experimentando la situación que le generaba malestar. Por supuesto el cliente lo hace desde un “lugar seguro” en el que está y se siente relajado y tranquilo.
 
La persona primero “rebobina” (observa hacia atrás) la experiencia fóbica desde un momento en el que ya se sentía seguro al finalizar, hasta otro también seguro antes de empezar a experimentar la situación que le genera problemas, en este caso volar. Posteriormente la persona observa esta película en “avance rápido” y finalmente a cualquier velocidad. Este proceso se repite varias veces hasta que se produce el descondicionamiento del que hablábamos: la persona es capaz de experimentar la situación con normalidad, sin experimentar ninguna emoción en particular. La vinculación entre volar y la respuesta de ansiedad y pánico desaparece.
 

Si padeces aerofobia o cualquier otra fobia específica la hipnosis es un medio excelente y terriblemente eficaz para superarla. Ponte en contacto con nosotros y te ayudaremos a recuperar el control sobre tus miedos. Tenemos los conocimientos y experiencia para conseguirlo.
 
La hipnosis te permitirá disfrutar de una vida más capaz, más feliz. Con más libertad.
 
 
Si te gusta suscríbete a nuestra newsletter

Compártelo con tus amigos y síguenos en Facebook

Gracias por tu tiempo e interés

Comparte esta noticia!